La verdad no lo entiendo

Cuando estaba más joven mencionaba que me gustaban los superhéroes, el anime, el manga, y similares, y me exponía a que mis compañeras (mis compañeros no decían nada) de clase me tildaran de infantil, de aniñado. “A mi no me gusta eso porque ya superé esa etapa” decían. Sólo a unos pocos nos gustaban los dibujos animados y el anime.

Hoy digo sin miedo que me gusta Bleach, la Liga de la Justicia, y que corro a verme cuanta película sale de cualquier superhéroe, ya sea en cine o en dvd, y cuando creo que me van a llover las críticas oigo, por el contrario, frases como “me gustas porque sos un hombre que sabe lo que quiere”, “me encanta que seas así”.

Entonces no entiendo… como es que ahora que me relaciono con gente adulta mencionar que veo dibujos animados no es sinónimo de ser niño. Es extraño que eso que antes tildaban como inmadurez sea ahora un claro síntoma de ser un hombre maduro. Para mí lo más normal sería que antes compartieran mis gustos y ahora me dijeran que eso es para niños, y no al contrario. ¿Será acaso que las jovencitas buscan hombres maduros (dentro de un prototipo que dista de las cosas juveniles) y las mujeres buscan hombres con alma de niños? No sé, tan sólo sé que hay cosas que no entiendo.

El mar y el amor

Una noche, mientras conversaba con un amigo sobre cosas del amor, del noviazgo, del querer a una persona, él me dijo:

-Al contrario tuyo yo no creo en el amor...

Y yo simplemente le respondí:

-El amor es como el mar: que no lo conozcas no quiere decir que no exista

Excusas

Luego de más de 15 días sin escribir nada para este espacio, tomé la decisión de escribir algo, para obligarme a poner algo aquí, algo que al menos pueda decir de las cosas de mi vida.

Ya llegó el segundo semestre del año, lo que implica que en mi trabajo, el ritmo de producción aumenta ya que los eventos grandes inician en esta temporada, uno tras otro, percusión, folclor, danzas, salsa, poesía, y más. Toda una avalancha cultural que se viene para esta ciudad.

Y tanta cosa no deja tiempo para los pequeños placeres de la vida. Siempre escribir ha sido una de mis vías de escape, una forma de darle rienda a las cosas que quiero decir, y mi trabajo es produciendo textos en forma, sólo que de tanto escribir no tengo tiempo para escribir lo que me sale y me nace (aunque debo admitir que puedo pasarme horas pensando la manera de redactar un boletín de prensa de forma que yo me sienta a gusto con el resultado final). Por ejemplo, de tanta cosa que sale me he olvidado de terminar la continuación de las canciones de mi vida, en esta ocasión con una selección, grandes éxitos para la intimidad... O también de un post sobre las cosas que le he aprendido a la gente en los últimos tiempos...

Los últimos días he estado escuchando canciones que hace rato no oía. Así descubrí que a Kayomi y a mí nos gusta mucho una canción de Gloria Estefan llamada "No me dejes de querer" y que nos dan ganas de algún día reproducir la coreografía. Ayer domingo me quedé en casa viendo varios capítulos de la octava temporada de Smallville, que tengo completa hasta el momento, gracias a un aporte de Cabeto.

Y por último, la gran enseñanza de esta semana: SÓLO YO TENGO EL CONTROL SOBRE LAS COSAS QUE SUCEDEN. Y que se atenga el mundo porque yo "abre que voy"...